EL AJUSTE QUE FALTA

La Argentina transita nuevamente por una encrucijada histórica, donde una nueva frustración parece estar instalada en dos posturas totalmente antagónicas.

Unos siguen creyendo en un gobierno anterior, que regalaba las migajas de un estado que ya había sido vaciado en varias oportunidades.

La otra mitad cree en los que ahora gobiernan, diciendo que nuevamente nos hemos insertado al mundo, un mundo globalizado, al que le podremos vender cientos de productos comestibles y otros ligados a lo agrícola primario y a lo fósil, y también a los metales, a través de fábricas que por las malas políticas implementadas no se sabe realmente hasta cuando continuarán en pié.

Mientras tanto todos discuten, pero lo que nunca discuten son las fortunas que el estado les abona mensualmente al sistema político y judicial, donde abundan las sumas de doscientos mil pesos a funcionarios, asesores y ñoquis allegados, mientras que a los llamados jubilados "de la mínima", apenas les pagan once mil pesos por mes.

FELIPE DEMAURO

Poema volcado a la historia de Rosario entre el lenguaje coloquial y el lunfardo.

LOS MANJARES DEL RICH

Siempre la fuiste de anfitrión
y gran gourmet del bacanaje
que fanfarroneaba al descorchar
botellas de champán
y de espumante beberaje
frente a los tufosos sobacos
de aquel Mercado Central
que ahora la ostenta de fifí
de "Centro Cultural"
donde chamuya al pedo la élite
tratando de agiornar
el embrollo intelectual
que divaga en su torre de marfil.

FELIPE DEMAURO

¿SERÁ ESTE EL MESÍAS ARGENTINO?

Alguien sabe... ¿Cuándo culminará el deterioro infligido por los sucesivos gobiernos a nuestra Nación?

Sucesivas grietas, corrupción, impunidad lacerante, discursos de ocasión triviales e hipócritas, vanidosos, fueron sumergiendo a nuestra sociedad en lo que vemos hoy.

¿Pero qué vemos hoy?

Una multitud de seres marginales, sin destino, totalmente obnubilados por una realidad que los atraviesa, muy cruenta, y que los lleva a tratar de evadirse en el día a día sin saber realmente a dónde llegarán.

En la República de los tres poderes fundamentales, el legislativo no funciona, porque no se ponen de acuerdo ni de dos en dos.

En el poder Judicial pasa exactamente lo mismo. Y entonces el ejecutivo que nota que gasta fortunas en estos dos mecanismos... ¿Qué hace?

Nada. Porque no le permiten en realidad hacer nada.

Y así seguimos malgastando el tiempo de elección en elección, esperando al Mesías salvador que decimos "alguna vez habrá de llegar".

¿No será que habrá llegado ya? En octubre o a más tardar noviembre lo sabremos.

FELIPE DEMAURO