2020 UN AÑO FATÍDICO

Muchas generaciones en el mundo entero, sin ninguna duda, habrán de recordar por muchos años más, a este nefasto año 2020, avasallado por esta pandemia llamada Covid-19.

En nuestro país como era de esperar, donde todo está atado con alambre, los resultados han sido verdaderamente catastróficos.

La miseria que se expande como una mancha de aceite imparable. La incongruencia de los métodos a seguir por autoridades totalmente desorientadas por la gravedad de no saber cómo combatir un virus tan extraño.

El temor que se ha propagado y se continúa propagando, creando una incertidumbre fatal a partir de este aparente cambio de locomotora, ahora con impronta oriental, en la formación de este verdadero rompecabezas global.

Y en medio de todo esto nuestra pequeñez y nuestra ciudad tan golpeada por adversidades, frutos solamente de nuestros desencuentros ideológicos por todos conocidos.

Sin lugar a dudas estamos atrapados en un compendio muy difícil de resolver, que pasa por un exterminio ecológico de nuestros paisajes bucólicos, una proliferación de narcóticos e indigencia que solo conduce a crímenes aberrantes y a una mayor descomposición social. Y sobre todo esto nos vemos privados de nuestras libertades garantizadas por nuestra Carta Magna, a raíz del mal funcionamiento de uno de los tres poderes de la república.

Por cuanto, desde mi punto de vista, solo nos resta rezar, y encomendarnos a la Vírgen y al Dios de la Navidad que en pocos días más estará entre nosotros.

FELIPE DEMAURO