3.11.17

LA REPUBLICA DE LA SEXTA

Pensar que su eslogan taura y más que sagrado
segun el acta de arraigo popular
"Una Sección menos pero una República más"
tambien se fue a baraja.

Y así se extinguieron junto a él
entre otras pinceladas vistosas
los legendarios cafés La vista alegre y La boca del Tigre.
El temible escuadrón de la policía montada
cuyo edificio aún subsiste
en la esquina de Alem e Ituzaingó.
La lavanderia de la calle Berutti
la Fábrica de Vidrio de Gabriel Papini
en Cochabamba y Esmeralda
y la de velas de la calle Ocampo entre Necochea y Colón.

El antológico burdel Castel Rojo
la estación del ferrocarril Rosario-Puerto Belgrano
y la Cerámica La Etrusca de la que ya no queda nada
excepto un par de chimeneas abandonadas
sobre un vasto mosaico de yuyales y escombro
donde se cruzan rejunándose con asco Chacabuco y Pasco.

¡La República de la Sexta!
Qué habra sido de aquellos farabutes
bastardos siempre en yanta que a pesar de todo
te confiaron su brillo.
La Viuda El Chancho La llorona
El hombre con cadena El Negro Azucena.
Qué habra sido de los pintorezcos carnavales
del Club Social y Deportivo Arizona
y de las pulseadas futbolísticas de Cualquier Cosa y La Fe
El Porvenir
Hindemburg o el Liverpool del Loco Sarmiento.

Y por supuesto lo que duele más
por qué espejismos andarán aquellas travesías transnochadoras
de los tranvías de la línea 6 y 11
flameando en la cúspide de sus trolleys
entre el chisperío azul y bronce
esa sensación de sabalaje bravío
enmarcado por las calles Galvez y Pellegrini
la vereda este de San Martín y el río.

¡La República de la Sexta!
A qué vate mistongo se le pudo ocurrir deschavarte
tanta alhaja de entorno con semejante asombro.
Si parece mentira que hoy tu nombre
apenas se palpite en las tenidas
del canónico escolaso de los clubes
que aún son de la partida.

¡Tu nombre! ¡Tu nombre guaso! ¡Tu nombre excelso!
¡La República de la Sexta!
Si parece ridículo amenizando la tertulia entretenida
entre cuatro veteranos de la clase pasiva.

FELIPE DEMAURO